Después de una terrible actuación en el campo de juego, el entrenador Daniels instruye al equipo poniéndoles toque de queda, lo que implica no salidas nocturnas, no fiestas y no chicas. Ninguno está de acuerdo, salvo Thad que explica que él no necesita dejar la casa para jugar con su juguete personal. Después del robo del juguete, el equipo entero disfruta de turnos múltiples lo que causa un brote de enfermedad por transmisión sexual. Mientras tanto, Denise promete a Craig que si juega bien el próximo partido, tendrá relaciones sexuales con él y Sammy intenta encontrar el regalo perfecto de cumpleaños para Alex.