En esta nueva entrega Warrick y Catherine investigan un cuerpo que apareció en un alcantarillado. Tras deducir que no se trataba un homicidio, un obrero haya restos de lo que posiblemente perteneciera a un hombre. Los CSIs tornan su investigación hacia la búsqueda de el resto de los huesos con el fin de hallar una relación o alguna pista sobre qué ocurrió. El resto de la investigación les lleva a una calle residencial en donde tienen como principal sospechoso a un hombre que posee artefactos explosivos en su casa.