Louis y Jessica son presionados para ser voluntarios en las escuela de los niños debido a los recortes presupuestarios. Eddie descubre el otro lado de su padre cuando Louis se convierte en el entrenador del equipo de baloncesto, mientras que Emery y Evan ven un lado de Jessica que desearían no haber visto cuando se encarga de mala gana de la producción de la obra de teatro de la escuela, y añade su propio giro.