A medida que nuestro heroico trío finalmente se acerca a Valencia, encuentran refugio y doo-wop entre los monjes locales que han hecho un voto de canto, liderados por el Monje Confesional. Madalena, frustrada con el rey Richard, decide tomar el asunto en sus propias manos con su propia trama tortuosa que involucra al chef agasachado y su sierva winsome, Gwynne.