Elizabeth se ve obligada a pedir excusas cuando un periodista publica unos documentos confidenciales que demuestran que el Departamento de Estado está en un compromiso a nivel internacional. Mientras tanto, Henry se pone en una situación difícil cuando el Ministro de Exteriores de Rusia le pide que le ponga a su hija un sobresaliente en clase de ética, a pesar de que la muchacha apenas llega al aprobado.