Lois y Hal se van un fin de semana solos a un hotel para parejas. Dewey se queda con Craig y Malcolm se queda en casa para invitar a una chica que le gusta, mientras Reese es enviado a Canadá con su abuela pero escapa del camión donde iba para planear una fiesta en la que invita a muchos adolescentes locos que se apoderan de la cochera, por lo que Malcolm y Reese recurren a Francis. Al final, Dewey les tiene una sorpresa inesperada, al estilo de sus viejos tiempos.