El entrenador de relaciones Marin Frist sabe qué buscar, qué evitar y qué la hará feliz. Como podrían decirte los muchos fans de sus dos libros más vendidos, todos estamos a cargo de nuestra propia felicidad. Pero como muchas personas llenas de consejos, ella no lo aplica a sí misma. En su camino a un compromiso de hablar en Alaska, se entera de que su prometido la ha engañado. Abofeteada en la cara con el fracaso personal, una tormenta de nieve la deja atrapada en una pequeña ciudad llena de lo único que realmente no necesita: hombres disponibles.