Sarah está a la fuga, y perseguida mortalmente por sus adversarios. Desesperada por encontrar a su hija Kira, Sarah sospecha de que la cruel Rachel está detrás de la desaparición de su hija y se pone en contra de ella. Alison y Donnie asisten al funeral de su amiga, Aynsley, que hace que Alison se hunda en culpabilidad y se desespere. Cosima se enfrenta a una decisión desconcertante que puede tener consecuencias espantosas.