Billy está harto de ser el idiota del pueblo y decide que es hora de ganarse el respeto de Mimi y sus compañeros solicitando un trabajo de vendedor de seguridad. Pero sin experiencia y calificaciones no es tan fácil. Las cosas comienzan a desmoronarse cuando Billy finge que ha asegurado el trabajo y se hunde a nuevos niveles en su búsqueda de respeto. Esther se sorprende al descubrir que el ojo negro de Thalia es el resultado de que su hija es una matón. Decidida a hacer que Thalia muestre más compasión por sus compañeros de escuela y dar un buen ejemplo, Esther se pone a disculparse con varios residentes de Chatsworth, pero están lejos de impresionarse. Mientras tanto, Lillian se compatiene de una descuidada Stella y la invita a pasar tiempo en su casa. Sin embargo, un burdel no es un lugar para un niño pequeño, especialmente cuando le da liendres a los valiosos trabajadores de Lillian.
Aún no se han agregado bandas sonoras al programa.