Con los niños creciendo, Beverly decide reinventarse y deja de ser una maestra sustituta. Ella decide enfocar su energía en ir a la escuela nocturna para que eventualmente pueda ser dueña de su propio negocio. A Murray no le gusta el cambio o las cosas que cuestan dinero, por lo que la convence de obtener un perm en su lugar. Mientras tanto, Erica lucha por equilibrar su vida académica y social en la universidad y necesita la ayuda de Adam.