Para evitar que la nueva cárcel de Burns siga perdiendo dinero, la policía comienza a detener gente por los motivos más irrisorios. Homer acaba metido en la cárcel y, a petición de Burns, se convierte en el soplón de la cárcel sin pensar en las consecuencias que eso podría acarrearle. Mientras, Lisa y Bart intentan descubrir por qué su gata Bola De Nieve II ha engordado tanto.