Moe se ve forzado a cerrar su taberna tras una inspección de sanidad, pero Homer decide ayudarle a reformarla hipotecando la casa de los Simpson sin ni siquiera comentarlo con su mujer. Marge, obviamente disgustada, decide hacerse cargo de la supervisión de la reforma de la taberna y acaba haciéndose amiga de Moe, con quien forma una dinámica pareja empresarial. Moe pretende llevar la amistad con su socia hacia algo más mientras Homer teme por su matrimonio