Cuando Bart no entrega sus deberes a tiempo, la señorita Krabappel envía una carta advirtiendo sobre el comportamiento de Bart a casa de los Simpson. A pesar de los grandes esfuerzos de Bart por interceptar la carta, Homer la lee y, junto con Marge, debe reunirse con el Director Skinner. Homer, furioso, castiga a Bart, pero Marge toma un camino más comprensivo. Cuando Bart se da cuenta de que puede utilizar esta pequeña discrepancia para enfrentar a Homer y Marge para su propio beneficio, sus travesuras alcanzan nuevos límites.