Cuando Bea es condenada a cadena perpetua sin libertad condicional por el asesinato de Brayden Holt, Ferguson lo deja muy claro - ella es dueña de Bea ahora. Así que cuando Bea usa su posición como Top Dog para golpear de nuevo, Ferguson toma venganza - ella ranuras Bea y libera a Liz de protección, exponiendo a Liz a un brutal golpe de Boomer. Pero Ferguson ha subestimado a Bea, que inicia un motín entre los prisioneros. Con la prisión encerrada Ferguson tiene que recurrir a Bea para sofocar el motín. Wentworth no es la prisión de Ferguson, es la de Bea. Se dibujan líneas de batalla.