Aparente suicidio en una recreación del 221 B de Baker Street, el domicilio de Sherlock Holmes. La víctima, vestida como él, pertenece a una sociedad de amantes del personaje de ficción que se reúne cada jueves para emular aquellos años. El esclarecimiento de esta muerte será la evaluación de Greg como CSI. En el otro caso, un joven surfista aparece muerto estrellado con su coche en una cuneta.