La complicada amistad de Jill y Roger se pone a prueba cuando finalmente se enfrentan por una redada de la DEA que dejó a un preso aferrado a la vida. Mientras tanto, Kate es asignada a un caso de contrabando de animales que involucra la muerte de un panda en peligro de extinción; y las emociones de Jay se convierten en un caso cuando se entera de que su padre confiado fue una víctima en un esquema piramidal.