Maggie encuentra en su jardín un yacimiento arqueológico compuesto por los antiguos útiles de una mujer india. Maurice, presto como siempre a hacer negocio, quiere convertir el lugar en una excavación. Maggie, indignada por su falta de escrúpulos, decide declararles la guerra a los hombres en general. Por otra parte, Ed empieza a tener pesadillas apocalípticas y a preocuparse por el futuro de la humanidad, mientras que Holling acoge a un joven fugitivo con el que se siente identificado ignorando que se ha enamorado locamente de Shelly.