Tras escapar de una redada policial en un salón de juegos de azar en Chinatown, Carrie se une a Al en el Centro de Recreación Morganson, donde la joven de 17 años Marisa Pérez ha sido abatida a tiros. A medida que avanza la investigación, matan al pandillero Oskar Mendoza y hieren al abogado y miembro activista antipandillero Jim Clayburn. Mientras la policía reúne pistas que apuntan a un tiroteo entre dos bandas enfrentadas, DKK y QB-6, Carrie se disgusta al descubrir que el detective Ben Cortez consiguió que Marisa fuera su informante en el caso contra DKK.