Maddie Harrington, de 10 años, aparece en la puerta de Ally diciendo que es su hija. Ella es el resultado de una confusión en el banco de huevos al que Ally depositó sus huevos hace diez años. Desde que el padre de Maddie murió hace seis meses, ella ha estado viviendo con su tía, que canta temas de televisión en clubes nocturnos para ganarse la vida. Después de mucho hablar, Maddie decide quedarse en Boston con Ally a modo de prueba hasta que resuelvan dónde se quedará. Mientras tanto, Richard toma el caso de un hombre que mató a su esposa después de darle una patada en la cabeza cuando la confundió con un balón de fútbol. John no cree que pueda ganar el caso porque no puede litigar, pero Richard lo sorprende cuando gana.